Las Cookies de mi abuela Kika
Desde chico como estas galletitas. Primero me las hacía mi abuela. Después las empecé a hacer para los chicos. Ahora las horneamos juntos. Son fáciles y muy ricas.
Desde chico como estas galletitas. Primero me las hacía mi abuela. Después las empecé a hacer para los chicos. Ahora las horneamos juntos.
-Hace un mes escribí este post con la receta de cookies que me hacía mi abuela con la idea de enviarlo el domingo siguiente. Y pasó el domingo y después otro y otro más. Y acá estoy, volví de un viaje quesero por Europa, recién ahora enviándolo. Por suerte las recetas (y las historias) no son perecederas y sirven aunque pasen semanas entre que se escriben y se envían.
Una lata violeta con un film arriba. Y otra lata más. Naranja. Una tenía con chocolate. La otra con nueces o almendras. Eran pequeñas joyas cargadas de manteca y azucar, además del ingrediente clave que determinaba la mita de su nombre. De Chocolate. De Nuez. De Almendras. De chico era preguntar cuando llegaba: “¿hay cookies?”. Ya de más grande no hacía falta, siempre que había café aparecía casi mágicamente la lata en la mesa.
Mi abuela Kika fue una gran influencia en mi vida gastronómica. Desde chico la visitaba y cocinábamos juntos. Y charlábamos. Y mirábamos películas en la TV de la cocina mientras hacíamos preparaciones. Tenía una gran cocina: ocho fuegos y dos hornos. Interminables mesádas de fórmica blanca veteada y ventanas que inundaban todo de luz. Y ganas de cocinar. Sobre todo ganas de cocinar. Juntos.
Kika era de ésas abuelas que te malcriaban con la comida y la bebida. Cuando la llamaba para coordinar una visita preguntaba siempre qué quería comer. Y cumplía. Pero me estoy yendo de tema. Cookies. Estas eran las de siempre. Las que estaban ahí cada vez que íbas. Las que te daba en una bolsita para que te lleves a tu casa. Desde que yo era chico. Hasta que fui adulto. Y me transportan a esa cocina. A esa mesa. A ella. Y por suerte le encantan a mis hijos también.
La receta original es del Libro The Boston Cooking School Cookbook que mi abuela recibió como regalo de casamiento en 1946. Y la hoja de las Cookies (Sugar Cookies se llaman en el libro) está bien gastada, de tantas veces que fue abierto el libro para repasar cantidades y la técnica. El chocolate y las nueces son opcionales, pero creo que van super bien. Por lo general hago con chocolate o nueces, pero si usas las dos también quedan super ricas. Las nueces se pueden reemplazar por almendras crudas o peladas cortadas en pedazos, o por avellanas! Es muy versátil la receta.
Espero que te guste.
Ingredientes:
Harina 210gr (1.5 tazas)
Mantequilla a temperatura ambiente 110gr (½ taza)
Azucar 200gr (1 taza)
Crema o leche 1 cucharada sopera
Huevos 1
Vainilla ½ cucharadita de té
Sal ½ cucharadita de té
Polvo de hornear: 1 cucharadita de té
Opcional:
Chocolate amargo cortado en trozos chicos: 2 barritas
Nueces o almendras 100gr picadas a cuchillo
Combinar en un bowl la mantequilla con el azucar, el huevo, la leche y la vainilla. Cuando esté todo integrado agregar el resto de los ingredientes hasta que haga una pasta uniforme. Va a quedar pegajosa. Enmantecar una bandeja para horno (o usar una hoja de silicona de pastelería) y con una cuchara de té agregar pequeñas cantidades separadas del tamaño aproximado de una nuez separadas 1cm aproximadamente. Mientras hacés esto precalentá el horno a 190˚C. Hornear por unos 8 minutos, hasta que empiecen a estar doradas en los bordes. Cuando salgan van a estar muy blandas, con una espátula pasar a una rejilla hasta que se enfríen.
Una vez que se enfrían quedan crocantes y aguantan muy bien en un frasco cerrado.
Espero que las hagan y que les gusten!
Anuncios:
El domingo voy a estar en Buenos Aires dando un curso de quesos naturales tipo Alpinos-Semiduros. Arranca a las 15hs y estaremos como hasta las 20hs entre la clase y degustación de quesos con vinos de bodega Ver Sacrum. Si te interesa saber sobre quesos (vayas o no a elaborarlos) creo que puede ser una experiencia interesante y divertida, además de una oportunidad para probar quesos naturales y vinos de alta gama y conocer gente apasionada por la comida. Quedan muy pocos lugares, podés ver la información acá:
https://martinrosberg.com/cursos/cursoalpinosdomingo26
Los primeros días de diciembre voy a dar unas clases a Lima, Perú, si querés información mandame un correo y te contacto con el organizador.
Gracias por leerme, espero que queden bien esas galletitas!
Saludos!
Martín